Ya Sabes Más De Lo Que Piensas
La investigación del ADN demuestra cuán acertados estaban nuestros antepasados sobre la presencia de, pues, nuestros antepasados. Están vivos y movidos dentro nuestra sangre, afectando nuestra caminata por la Tierra más de lo que sabemos.
El alcoholismo, el abuso físico y mental, la pobreza, así como la creatividad, los dones curativos y las creencias – todos viven en nuestra sangre e influyen en nuestras vidas. No importa en qué estemos trabajando, en qué curación, enseñanza o ceremonia estemos involucrados, la sangre siempre figura en el cuento.
Un amigo me preguntó si hacíamos “curación ancestral” en nuestro altar. Le expliqué que “curamos la sangre” diariamente, continuamente, así que de esa manera, sí, hacemos curación ancestral todo el tiempo. Su pregunta nos agradó, sin duda, pero también nos alertó sobre cuánta curación ancestral y otra información relacionada con el alma se está generalizando, bajo las banderas de la ciencia y la espiritualidad.






En otras palabras, si el tema de los antepasados te llama, el conocimiento está disponible en varios formatos y modelos para tu conveniencia. La ciencia del ADN es un factor poderoso para despertar nuestro potencial, pero uno no necesita ser un científico, o contratar a un sacerdote, para llegar a nuestros antepasados. Tus antepasados están ahí, en tu sangre, disponibles para tu reflexión, exactamente 24 horas-7 días.
Además de eso, cada uno de nosotros, de todas las razas, tenemos formas de honrar a los muertos a través de nuestras propias líneas de sangre, ya sea que la familia lo esté practicando ahora o no. Simplemente pregúntale a uno viejo u observa un funeral en tu comunidad. No tienes que saber acerca de los cromosomas x e y para trabajar en tu ADN.
Cuando los vivos y los muertos fluyen como deben, todos se benefician. Un poco de atención a nuestros antepasados puede marcar una gran diferencia. El aro ancestral que encuentra su ritmo florece, fuerte y brillante en la vida y la muerte: buen objetivo, no?
Y tu, siendo parte de un linaje, y estando vivo, puedes contribuir a ese florecimiento. El conocimiento, justo, ahí esta, en la punta de los dedos, en la punta de la lengua…tus antepasados.