El Itinerario Angelical
¿Qué puedo decir acerca de los ángeles? Ya has oído hablar de ellos, o los has sentido, o incluso los has visto. Escuchaste de la iglesia y de la Biblia. Has escuchado de amigos y familiares. Tal vez,los hayas sentido. Los ángeles están literalmente en todas partes y están disponibles para los seres humanos para ayudarnos a navegar nuestra experiencia en este duro planeta, pero no siempre lo sabíamos.
Hemos operado nuestro altar durante más de 40 años, pero no fue hasta hace 10 años que abrazamos a los ángeles y su agenda, su itinerario, para ser más precisos. No creíamos en los ángeles. Pensamos que era otra mentira de la religión.
Un día me encontré en la posición de pedir a los ángeles pruebas de su existencia. Pepe, nuestro Chihuahua, estaba perdido. Estaba fuera de la ciudad y le pedí a un amigo que pusiera un anuncio. Les dije a los ángeles: “Encuentren a Pepe, traerlo a casa seguro, entonces creeremos.”

Conduciendo a casa desde el aeropuerto, cuatro días después, tuve la fuerte sensación de subir por una calle, cerca de mi casa, pero fuera del camino. Confié en la sensación y tomé el camino más largo a casa.
Entrando a esa calle recibo una llamada telefónica. “Pepe está justo al lado de la avenida España”, dice una simpática señora. Dos cuadras más tarde me entrego a una calle residencial y cuando Pepe muestra su emoción al verme, ella lo suelta. Trae un cono en el cuello. Si lo cuidaron, está bien.
Tenemos muchas más pruebas que ese pequeño incidente ahora, pero ahí es donde el itinerario angélico empezó a revelarse en nuestro altar.
La mayoría de las religiones que hablan de ángeles tienen enfoques muy restrictivos para la comunicación y la cooperación con estos seres asombrosos. Hay mucho respeto por los ángeles en las religiones dominantes, pero se ofrece poca información y no hay estímulo para saber más sobre ellos, y mucho menos para comunicarse con ellos.
Al aprender más sobre los ángeles, me di cuenta de que las personas que han tenido encuentros con ángeles son, por decir, poco restrictivas cuando nos hablan de los ángeles. Los seres humanos que comparten experiencias con ángeles están ansiosos por contarle a alguien, por enseñarles lo que el ángel les enseñó a ellos. Es tan difícil hablar de ángeles como lo es hablar de extraterrestres y ovnis, pero estas personas desean revelar todo tipo de “secretos,” respecto a los ángeles. Estas personas nos aconsejan a todos que persigamos ángeles con toda nuestra fuerza, y ofrecen maneras de hacerlo. Cada libro, video, orador que encontré, afuera de las religiones, tenía un mensaje en común: los ángeles están en todas partes y disponibles para los seres humanos.

¿Que hubiera sido de nosotros si los curas no hubieran enseñado esa realidad en vez de todas las pendejadas que nos hicieron pasar? Perdón, pero el hecho de que esta enseñanza puede ayudarnos de maneras maravillosas y, sabiendo eso, las religiones deciden que los humanos, comunes y corrientes, no deben conocer esa gracia.
Siendo un cínico registrado, me alejé del tema de los ángeles todo lo que pude, pero, en contra de mi voluntad, trozos, pedacitos, de información útil empezaron a surgir en nuestro trabajo del altar, trocitos que no podíamos ignorar. Nuestra experiencia nos mostró lo verdaderamente funcionales y efectivos que son los ángeles con humanos que se abren a la experiencia. Quedó claro que los ángeles tienen un itinerario mucho más vasto de lo que somos capaces de imaginar. Se trata de hacer de la Tierra un planeta exitoso.
Ahora el itinerario angélico se convirtió en un componente fuerte de nuestro altar; los toltecas y los ángeles bailan muy bien juntos. Los ángeles saben, por ejemplo, lo que dice nuestra alma, y si nuestra vida acuerda. Si pedimos ayuda y permitimos que nos alcancen, sinceramente y honestamente, las relaciones se desarrollan. Es como hacer un nuevo amigo. Si logramos honrar nuestra palabra y hacer lo mejor que podamos, la amistad tiene posibilidades.
Si te sientes atraído a estudiar a los ángeles, a comunicarte con ellos o simplemente a obtener ayuda con algo, tienes todo lo que necesitas para nacerlo. Tienes un alma, una mente y la capacidad de comunicarte. Probar una oración o un ritual. Experimentarás algo y si es suficiente, no necesitarás más pruebas. Ve ahora y